Boletín 1


Boletín 2

Me provocaba una interrogación un adolescente, consumidor de tóxicos, quien había rociado combustible a la casa de su hermano porque había imaginado que lo había traicionado.

La violencia es clasificada: violencia de género, abuso infantil, trata de personas y se espera para cada una de estas clasificaciones un tratamiento especializado.

Lacan, en su seminario “Aún” nos recordaba las relaciones del derecho con el goce.

A cada clasificación de violencia, o podría decir, de pérdida de derechos surge también una nueva legislación que intenta absorberlos, clasificarlos y resguardarlos.

Y en la bienvenida de los nuevos derechos, perdemos de vista que son intentos de incluir en un universo homogéneo los goces de cada uno.

El psicoanalista frente a estas clasificaciones del derecho: ¿podrá incluir la pregunta por la fragilidad de los pactos que sostienen los lazos sociales? Si lo consigue, estará a la altura de la época.

Daniel Perretta

Miembro de la EOL y de la AMP


Boletín 3

Una de las formas de violencia que se presentan hoy, y sobre todo en las escuelas es la del sin sentido, sin sentido en relación al ideal, ideal que el objeto no puede aportar más que una satisfacción pulsional incompleta. Donde lo disciplinario y las formas tradicionales de educación no tienen chance de operación.

El fragmento de la película Pulp Fiction (1994), nos acerca una interpretación de la subjetividad contemporánea, nos presenta el marco cultural de la época. Un mundo que funciona sin Otro, sin el Otro clásico que organizaba el discurso social, en su lugar según lo indicaba Lacan en 1970, es el objeto con su “ascenso al cenit” el que ordena la sociedad.

La declinación social de la imago paterna, lleva consigo la declinación de los ideales y de los semblantes de autoridad. El objeto comanda tal como se refleja en este recuerdo infantil, con un toque de ironía que juega con lo trágico y lo absurdo en relación al padre y el objeto.

Fabián Dutto


Boletín 5

El 1 de Junio del 2015 fue lanzado un nuevo video juego desarrollado por Destructive Creations, llamado Hatred, se trata de un juego agresivo, sangriento y violento. El protagonista no tiene como enemigo a ningún ejército, ni fuerzas de la ley, ni está en contra del sistema capitalista, solo tiene entre ojo y ojo a los sujetos civiles.

Uno de los primeros videos en salir se llama “conviértete en un genocida urbano”. Este juego fue calificado como solo para adultos.
Sus creadores lo desarrollaron en Polonia intentando hacer una contraposición a esos otros que ellos dicen, intentan educar, son políticamente correctos y buscan ser arte en vez de puro entretenimiento.

Las críticas a este nuevo instrumento de “entretenimiento” han sido muchas, entre ellas insiste la versión de que se trató de una maniobra de parte de los creadores para entrar en el Mercado.

La paradoja reside en que a pesar de que el protagonista del video juego no lucha contra el sistema, es por entrar en él, que sus inventores lo crearon. Podemos ver en esto el testimonio del servicio al que se prestan y el mandato que establecen, podríamos leerlo así “Si ya nada te divierte, entonces, mata, puede resultarte un buen entretenimiento”.

Susana Colabianchi

Miembro EOL y AMP


Boletín 6


Boletín 8

MÁS ALLÁ… DE LA CULTURA

A mayor extensión de los procesos de homogeneización de modos de gozar, control sobre los cuerpos, estandarización de las prácticas, mayor el correlato de efectos de segregación.

En 1964 Lacan preveía la extensión cada vez más dura de tales procesos con el porvenir de mercados comunes.
Lo segregado en la intimidad aparece como extraño.

Éxtimo, dice J. Lacan. J.-A. Miller desarrolla: lo éxtimo cuestiona al Otro y desplaza el fundamento de la alteridad del Otro del significante al goce.

El goce instituye la alteridad del Otro.

En el racismo el odio se dirige hacia aquello que funda la exterioridad.

En “Televisión” Lacan dice: “En el extravío de nuestro goce no existe más que el Otro para situarlo”.

Los atentados globales hoy plantean un malestar que exige ser pensado en y más allá de nuestra cultura: entre culturas, o entre una cultura y una parte segregada de la misma o de otra cultura.

Pero ese malestar “más allá” revela tener una raíz en los procesos de segregación de la nuestra.

Raúl Vera Barros

Miembro EOL y AMP

Integrante de la Comisión c

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